Estadística de Niños Huérfanos en Honduras

NIÑOS HUÉRFANOS EN HONDURAS

Conforme al diccionario de la Real Academia Española, Un huérfano es el que ha perdido físicamente a uno o ambos progenitores.

Niños de la calle es el término usado para llamar a los niños que viven en las calles de una ciudad, privados de atención familiar y protección de un adulto. Los niños de la calle viven en edificios abandonados, cajas de cartón, apartamentos, estaciones en desuso o en cualquier rincón donde puedan dormir sin ser agredidos ni descubiertos por la policía. Es difícil encontrar una definición precisa que pueda definir la enorme variedad de circunstancias en las que estos niños de la calle viven día a día. Sus condiciones son muy heterogéneas, desde niños que pasan todo el día en la calle y duermen en casa, con unos padres poco capacitados para atenderle adecuadamente; a jóvenes totalmente independientes que establecen sus propios grupos sociales, o comunidades de drogadictos dedicados al robo

Alrededor de 202,032 niños son huérfanos, entre estos, un 40.7 por ciento (82,000) perdieron a uno de sus padres o ambos por el clima de inseguridad que se vive en el país. De la cantidad de huérfanos que hay en Honduras se estima que alrededor de 5,000 se encuentran en riesgo social.

La orfandad afecta mayormente a los pobres, quienes están más expuestos a la inseguridad. Las estadísticas indican que el flagelo de la inseguridad ciudadana está dejando desamparados a 57 niños cada 24 horas.

La encuesta del INE revela que del total de huérfanos, 8,531 perdieron a su padre y madre; 46,165 perdieron solo a su madre y 145,851 han perdido solo a su padre.

Según datos del Ihnfa, la población huérfana en riesgo social en Honduras oscila entre 4,000 y 5,000 menores.

En la actualidad esta institución brinda atención directa a 6,000 ó 7,000 menores a través de sus diferentes centros en todo el país.Por año, se estima que el Ihnfa entrega en adopción alrededor de 60 menores que son declarados en abandono a través de los juzgados competentes.

Los saldos trágicos también desencadenan explotación económica, sexual, maltrato físico y psicológico.

En la actualidad, en nuestro país, se ha visto incrementado el numero de niños y niñas abandonados debido a muchas causas:

• Embarazosa temprana edad.
• Irresponsabilidad de los padres de familia.
• Infidelidad.
• Falta de un ben nivel económico.

Del total de 200,547 huérfanos en el país, 81,055 se encuentran en el área urbana y 119,492 en el área rural, es decir, hay una diferencia de 32.17 por ciento entre el número de huérfanos en el área rural y urbana en Honduras. En el caso del área urbana, de una población de 347,413 niños de 0 a 4 años de edad, hay 5,734 menores que no tienen mamá o papá, de los cuales 59 son huérfanos de padre y madre. El dato refleja que el 1.6 por ciento de la población entre 0 y 4 años de edad en el área urbana de Honduras es huérfana.

Un elemento que llama la atención es que el mayor número de huérfanos está entre las edades de 15 y 17 años siempre en el área urbana. Para el caso, de 267,204 adolescentes de 15 a 17 años de edad que hay en el área urbana de Honduras, 25,772 son huérfanos, de estos 1,491 de padre y madre.

Sector rural 

En el sector rural, las cifras de orfandad son superiores a las registradas en el área urbana. De una población de 2,057,239 niños de 0 a 17 años de edad que reside en el área rural de Honduras, 119,492 son huérfanos (5.8 por ciento), 4,298 de padre y de madre.

En el área rural de una población de 468,941 niños de 0 a 4 años de edad, 7,307 son huérfanos, es decir, el 1.5 por ciento de la población rural de 0 a 4 años de edad no tiene papá o mamá.

De un total de 339,306 adolescentes de 15 a 17 años de edad que hay en el área rural de Honduras, 33,527 son huérfanos, de los cuales 1,289 de padre y madre. El 9.8 por ciento de la población rural de 15 a 17 años de edad es huérfana en Honduras.

Esos pequeños más conocidos como "niños de la calle", para sobrevivir, la mayoría trabajan más de 10 horas al día, distribuyendo periódicos, limpiando carros en los semáforos o gasolineras, recogiendo chatarra, vigilando carros, vendiendo caramelos, cargando bultos o mendigan, entre otras cosas que los hacen distintos a los pequeños que gozan de todos los privilegios.

Ellos no pueden y no tienen cómo, festejar el Día del Niño, muchas veces son explotados, sin tener acceso a la educación ni a la salud, están condenados a la pobreza y a la exclusión. Aunque el Congreso Nacional ha hecho varios intentos en proteger a la niñez hondureña aprobando medidas que pongan un alto a esta problemática.